Durante el otoño y el invierno los jerseys de cuello alto y las bufandas nos nos permiten camuflar todas las imperfecciones y el paso del tiempo del cuello y el escote.
Pero el frío da paso a la primavera y verano haciendo cada vez más difícil e incluso a veces imposible camuflar esa parte de nuestro cuerpo.
¿A quién le preocupa el cuello?
Es una preocupación que tienen tanto hombres como mujeres. Aunque, a partir de los 40 años es cuando empiezan las alteraciones y es a partir de los 50 años cuando nuestras pacientes empiezan a consultar.
Sin embargo, hay casos de pacientes mucho más jóvenes con cuellos con poca definición, exceso de grasa e incluso flacidez.
Nunca es pronto ni tarde para consultar por el cuello. Cuando aparece el problema es un buen momento para encontrar una solución.
¿Por qué nos preocupa el cuello?
La preocupación puede deberse a distintas causas:
- Porque tiene mucha grasa.
- Porque tiene muchas arrugas y manchas.
- Porque está muy descolgado.
- Porque se le marcan unas cinchas que empeoran cuando se contrae esa zona.
¿Se puede hacer algo en casa para que el cuello mejore?
Por supuesto, el primer tratamiento es utilizar una cosmética adecuada que frene el envejecimiento y nos ayude a mejorar la piel. Aun así no existen los milagros y es posible que sea necesario hacer alguna cosa más.
¿Hace falta pasar por un quirófano?
Depende de cada caso, pero en muchas ocasiones NO.
Podemos hacer tratamientos en la consulta que van a conseguir reafirmar el cuello por ejemplo con mesoterpia. También podemos tratar las manchas y las arrugas superficiales con laser. Inyectar toxina botulínica para mejorar las bandas platismales o poner hilos tensores para marcar el contorno del cuello.
Hay ocasiones en las que estos tratamientos no son suficientes y tenemos que realizar pequeñas intervenciones, como pequeñas liposucciones, con anestesia local en el quirófano de nuestra clínica que permiten una recuperación muy rápida y con cicatrices mínimas.
¿Entonces, seguro no hace falta cirugía para mejorar el cuello?
Por desgracia no todos los cuellos pueden mejorarse con medicina estética o procedimientos mínimamente invasivos.
Hay casos en los que tendremos que ir al quirófano con anestesia local y sedación, o anestesia general para hacer un lifting de cuello.
En esos casos será preciso hacer incisiones que quedarán ocultas alrededor del lóbulo de la oreja y/o detrás del mentón, prácticamente impercetibles, y los resultados pueden llegar a ser espectaculares.
¿Cuál es el mejor tratamiento para mi?
El mejor tratamiento siempre es el que se diseña “a medida” para cada paciente. No hay dos personas iguales ni dos cuellos iguales, así que es necesario hacer una valoración para elegir el tratamiento ideal para conseguir el resultado perfecto.
¿Te animas a venir para que valoremos tu cuello?